Como dice el dicho. Ni son todos los que están ni están todos los que son. Vemos a compañeros señalados y no gusta. Se podría haber contado lo mismo (o no, ¿quién sabe?) sin nombres.

Libertad Digital hace auténtica mierda con una clara intención de crispar y de paso, justificar lo que venga. Son unos mandados, periodismo a
la carta, lo que se lleva ahora más que nunca. Aquí también se hace, no nos podemos extrañar. Pero el Tena desaprovecha tan jugoso material. Confunde Churras con Merinas y se le escapan algunos perfiles que deberían encabezar su lista. No le falta razón en mucho pero le sobra saña y resentimiento. También le falta buen oficio, honestidad y sobre todo rigor. No hace más que periodismo de ladrido, vomitar lo que le filtran sin intención de mostrar toda la realidad de esta empresa; sin intención de reflexionar; analizar…

Es casi más interesante especular sobre el «cómo le llega» que lo que dice en si. Todo el mundo busca al topo y algunos señalan a los sindicatos y en concreto a la CGT. Nada más lejos de nuestra intención. Nunca hubiéramos puesto algunos nombres que aparecen ahí injustamente. Compañeros que no han tenido ningún  cargo en la redacción. Y no se nos escaparía una delegada sindical de peso que consiguió en los 300 un Hat Trick (eligió categoría laboral, puesto y provincia). Parece que quién filtra tiene miedo a los sindicatos y a la parte técnica porque se ceba con la redacción de tele de Sevilla. Olvida nombres importantes de la radio. Debe de haber más de una fuente y puestos a especular, nosotros diríamos que se trata de alguien que conoce muy bien la casa y las distintas redacciones y que ve peligrar su estatus y comienza a revolverse. o a trabajar para los otros. ¿Quién sabe?

La RTVA no es una isla. Lo que aquí ocurre es el mal endémico de este país. Enchufes, control partidista de lo público y necesidad de controlarlo todo por parte de nuestros queridos políticos. Pensamiento único, así es más fácil manejarnos. Han sido y son  políticos los que han generado esta basura en la RTVA, en RTVE, en Canal Nou, en Telemadrid o en TV3. Siempre se repite el mismo patrón, da igual quién gobierne. Los que han llegado ahora a la Junta y desembarcarán aquí no son distintos. Solo hay que darles tiempo.

La cuestión es si los políticos pueden hacer esto de controlarlo todo ellos solos. ¿Son estos compañeros que aparecen retratados víctimas de un sistema o han contribuido a él? Aquí en la RTVA el contenido informativo ha estado siempre secuestrado. Y muchos de los que ahora se ven en esa lista lo saben. No alzaron la voz cuando fueron propuestos a una edición, a una jefatura o a dirigir un programa sin ningún criterio objetivo. Miraban a otro lado mientras se saltaban  todos los principios de igualdad, mérito y capacidad. O simplemente, pisando a redactores con bastante más experiencia. También el resto de redactores (la mayoría) miraban para otro lado sin cuestionar nada.

Sobre los procesos de «estabilidad en el empleo» tampoco va desencaminado. Aquí se han hecho siempre las convocatorias pensando en unos cuantos y siempre con la connivencia de los sindicatos mayoritarios. Trajes a medidas de la empresa, UGT y CCOO. Duele verlo en un medio tan guarro como Libertad Digital pero aquí todos lo sabíamos. Lo que pasa es que este «periodista» elude algunas cuestiones sustanciales, principalmente por esa falta de honestidad a la que antes aludíamos. Por ejemplo, que los 316 están bendecidos, más que le pesara entonces a la CGT, por la Audiencia Nacional primero y por el Supremo después. Los 300 son más fijos que los fijos. Como lo hubieran podido ser todos los contratados de entonces (432) tal y como exigió CGT. Ya que íbamos a comernos un sapo, que éste acabara con el problema de la contratación. Borrón y cuenta nueva. Pero parece que sindicatos mayoritarios y dirección necesitan tener a la gente hipotecada.

Se echa en falta también en los ladridos del Sr. Tena la responsabilidad del resto de grupos políticos en todo este tinglado de la RTVA. El Estatuto de Autonomía blindó la RTVA, y el PP de Arenas (ese con el que Pedro de Tena compartió piso en Madrid cuando fue ministro) lo permitió. Al igual que IU permitió un Subdirector interino que gane más que el presidente de la Junta. Al igual que PP y PSOE han bloqueado, — como dice la canción– juntos de la mano, más de 4 años la renovación del Consejo de Administración. Incluso se permitieron negociar un subsecretario más para el PP. Ese que luego hace de abogado en los ERE. Los andaluces pagan el abogado del PP en la acusación popular. En fin. ¡políticos!

El propio Consejo de administración, ¿qué ha hecho? Cuántas veces hemos ido a denunciar a todos los grupos políticos del Consejo los dedazos, los programas de Petit con 0,01 de audiencia,  las contrataciones y externalizaciones millonarias como las de las DSN (ahora las mochilas, cambia la tecnología pero todo sigue igual). Todos trincaban sus 70 mil euros anuales y callaban. La mayoría, como reconoce el consejero de IU, repartía su sueldo con el partido. Un chiringuito en toda regla, un robo legal pero ojo, no solo en la RTVA.  Algunas de esas externalizaciones salen ahora en el reportaje de los 30 años de Canal Sur Televisión en el programa Los Reporteros. Nos la venden como si fueran los que han creado esta tele. Ese reportaje de los 30 años dice mucho de lo que aquí estamos comentando. ¡Contenido secuestrado! Editores a dedo que muestran una realidad que solo ellos/as ven.

Pero aún falta una reflexión aún más cruda, la de la propia profesión del periodismo. ¿En qué se ha convertido? Los medios privados acusan a los públicos como si ellos estuvieran limpios, cuando mienten con mayor impunidad aún. De ahí que cada grupo político prefiera su medio privado afín (caso de PSOE con la SER). Y los profesionales vendidos y denostados. Las cosas importantes para los que se dejan aconsejar o dictar y los que no quieran patrones, simplemente a dejarlos morir de asco.

Y se habla mucho de oposiciones y de cómo entró uno u otro, cuando sacar unas oposiciones tampoco garantiza rigor ni honestidad en esta profesión. La tele está llena de ejemplos y en todas las categorías, no solo redactores. ¿El precio? Estar a merced de lo que venga.