Hace falta aire fresco. En la redacción de informativos y programas de Canal Sur Radio es necesario aire fresco. No sólo por las diminutas ventanas, muchas de ellas herméticas que dejan vislumbrar que existe un mundo exterior con oxígeno y hasta buenas noticias.
No sólo por las relaciones laborales irrespetuosas que a veces se confunden con las personales y originan conflictos que se arrastran durante años sin que exista mediación. No sólo porque las coordinaciones de informativos y ediciones se nombren desde la dirección sin más, sin atender a veces a criterios profesionales, ni a la interesante opinión del resto de personal que deberá bregar con dicho mando. No sólo porque esta dirección lleve años dando tumbos, jugando a hacer Radio y TV, preocupados por mantener su alto nivel económico y la imagen que de ellos pueda tener la Presidenta de la Junta, o los consejeros de turno. No sólo porque esta misma dirección no tenga ni idea de qué va a hacer con la fusión.
Ni siquiera porque se desprecie la creatividad, la profesionalidad, y las ideas de una plantilla madura, en plena efervescencia, con ganas de ser tenida en cuenta. Y tampoco porque esta empresa esté a la cola en inversión en medios interactivos, redes sociales, redacciones multimedia. Hace falta aire fresco porque tantas malas decisiones y escasas ideas del equipo directivo actual ya no se pueden esconder por más tiempo. Porque el público al que se debe esta cadena de emisoras está muy lejos, afortunadamente, del dibujo caricaturizado que se hace de él y ya no nos elige.
Y sobre todo, hace falta aire fresco por respeto a nosotros mismos, para hacer del lugar de trabajo un espacio sano, saludable, de buen ambiente. Un área en la que se valoren, se incentiven y fomenten las aportaciones de los trabajadores. Donde haya verdadera cooperación y no competencia. Donde exista el diálogo y se atienda a la diversidad de la sociedad andaluza, no a los tópicos. Quizás al abrir puertas y ventanas, el aire fresco que necesitamos respirar entre e impregne la cabeza de la actual dirección para inspirarles a adoptar sabias medidas como la de dimitir.