La Dirección de Canal Sur ha encontrado un chollo en esta situación de excepcionalidad: el control de la información total para manipular a su antojo. Se cobija tras un paraguas imaginario de la falta de personal para renunciar a las desconexiones provinciales en la TV. ¿Pero esa situación es en todas las delegaciones, o tan sólo en dos? ¿Sabe si los trabajadores de las delegaciones están dispuestos a ese esfuerzo? ¿Quién lo ha decidido y por qué?
Analicemos el caso de Córdoba, por ejemplo. Hay disponibles cinco cámaras, cuatro montadores, seis redactores, una productora y dos técnicos. Sin situación de riesgo. Entonces, ¿dónde está el problema? Pedimos la vuelta inmediata de las desconexiones con las suficientes garantías de salud e higiene en las circunstancias actuales.
Ya está bien de esta situación de excepcionalidad añadida a la real de la pandemia. Con un departamento de RRHH que tiene a los trabajadores en un limbo y que no organiza nada, ni siquiera reuniones para informar a los sindicatos de lo que pasa, con la que está cayendo. Ha tenido que ser la Inspección de Trabajo la que les obligue a mantener videoconferencias con la Representación Legal de los Trabajadores. La cúpula de Canal Sur cree que todo vale y aprovecha la incertidumbre para hacer y deshacer lo que le viene en gana y lo que le dicta el tripartito desde San Telmo con la excusa de preservar la salud de los trabajadores. Aunque cuando llega la hora de la verdad, la salud se la pasa por el forro llevando al portavoz de Vox a la redacción de Córdoba en plena cuarentena para un directo. Y es que el descaro es aplastante: Quito las desconexiones provinciales, y así puedo enchufar todos los días a la pareja del momento, Bendodo y Aguirre… ¿para subir la audiencia? Controlo la información que se emite en los locales (no vaya a ser que veamos otra realidad distinta a la que nos cuentan, gente pasándolo mal en muchos pueblos…) y de paso me centro en aquello que realmente me interesa, San Telmo. Hago apagón provincial y lo maquillo con una minúscula y atrofiada ronda grabada. Y todo para generar unos informativos con excesivo, tendencioso y abusivo servicio político, y marginación del servicio público que es el que estamos obligados a dar. Es evidente la sobresaturación política en los informativos, excesivo protagonismo a las ruedas de prensa en directo, sobre todo las del Gobierno andaluz, para escuchar mucho politiqueo y pocas noticias. Una de las principales funciones de los periodistas es asistir (o seguir desde la redacción) a las ruedas de prensa para después contar lo que realmente tiene interés informativo. Sólo en casos muy excepcionales dan ruedas de prensa en directo porque la relevancia informativa lo requería, pero nunca se dan todas las ruedas de prensa por sistema. ¡Y para eso hay un fantástico canal ATV! La línea informativa de Canal Sur, además de hartar a la audiencia con tediosas y largas ruedas de prensa, es suicida para un informativo que se precie. ¡Vaya chollo JuanDe, vaya chollo! ¡JuanDe, vete y llévate lo que te has traído! Os estáis cargando la TV, aunque paguéis para que los medios digan lo contrario. Señor Marín, Vicepresidente, os están ganando la partida, y os están adelantando por la derecha más extrema, la que lleva de cabeza a la cuneta.
¿Dónde está el Consejo de Administración, dónde está la Comisión de Seguimiento y Control de la RTVA, dónde está el Consejo Audiovisual Andaluz? ¡Ah! que todos están en el mismo negocio: la política. Veis como la información pública debe estar en manos de profesionales, no de políticos o comisarios políticos.
No a las desconexiones de San Telmo
¡Desconexiones provinciales ya!
¡Ruedas de prensa de ATV!