El 14D ha sido un día para que todos aquellos que llevan décadas queriendo meter mano en esta empresa pública se enteren ya de que los trabajadores de la RTVA, Canal Sur Radio y Televisión vamos a pelear por este servicio público estatutario y vertebrador de la sociedad andaluza.
La jornada reivindicativa comenzó más temprano para CGT-RTVA, en la puerta del Parlamento de Andalucía, donde sus “señorías” presentaban sus enmiendas en la Comisión de Hacienda. PP, Cs y Vox no aprobaron ninguna de las presentadas y apoyadas por los grupos de izquierda para dotarnos de mayor financiación y poder así paliar los recortes impuestos por Vox. Finalmente, salvo que el 23D se vote algo distinto, la RTVA sufrirá un drástico recorte, no materializado en los 14 millones que querían que restásemos al presupuesto de 2020, sino obligándonos a tirar con el presupuesto del año pasado que, por la caída del mercado de la publicidad, nos ha llevado a necesitar una financiación extra de la Junta de Andalucía de 11 millones. Además de un recorte de 3,5 millones de la enmienda del partido filofascista. Si sumamos, nos lleva a esos 14 millones de menos. Además de la obligatoriedad de amortizar las plazas por jubilación, que rondan las 80, y sin contar con la exigencia del partido de ultraderecha de ajustarse al presupuesto sí o sí. No sabemos qué nos deparará el futuro si no cumplimos con el ya exiguo presupuesto. Por todo esto, CGT-RTVA quiso estar recibiendo a los miembros de esa comisión en la puerta del Parlamento Andaluz.
No podemos culpar solo a Vox, cuando PP y Ciudadanos no tienen escrúpulos en negociar con un medio público como si les perteneciera.
Ahora hay que poner la atención en las jornadas de huelga general convocadas para el 22 y 23 de diciembre y en la negociación del Comité de Huelga con la dirección de la empresa. La negociación está centrada en cómo afrontar la programación de esos días, una pantalla en “negro” o buscar una programación alternativa. CCOO ha presentado una programación que respeta 15 minutos de informativos en las dos ediciones y todo lo demás enlatado. No queremos romper nada, pero es difícil seguir el rebufo de los compañeros cuando se levantan del Comité de Huelga y luego presentan una programación sin ni siquiera mostrarla al resto de sindicatos. Parece, y es legítimo, que ellos ya tienen su itinerario marcado, pero en solitario. Es curioso, cuando UGT, SPA y Agrupación de Trabajadores tienen la mayoría del Comité Intercentros. Se nos relega a un papel de invitado de piedra, como quedó claro en el acto central del 14D donde, una vez más, no hubo voz para los sindicatos minoritarios pero con representación también legítima en la empresa. A CGT nos hubiera gustado escuchar la voz de los trabajadores de esta casa incluida la de alguno de los compañeros ya jubilados que desde fuera están apoyándonos incondicionalmente. Pese a todo seguiremos. A nosotros nos gusta la programación de CCOO aunque no hayan contado con nosotros. CGT-RTVA ha estado trabajando las parrillas de esos dos días y hemos visto con desazón que TODO, salvo los informativos N-1 y N-2 de esos días, está externalizado. Es muy difícil hacer una huelga a costa del sueldo de los trabajadores y permitir que se vea Bertín Osborne o Juan y Medio o los programas de Secuoya donde trabajaba nuestra directora adjunta. La única duda que tenemos es la conveniencia o no de permitir la retransmisión del Sorteo extraordinario de la Lotería Nacional que realiza ADM. Sería una oportunidad para poder “bombardear” a la audiencia con los vídeos de apoyo de la Plataforma en Defensa de la RTVA y con algunas promos de los hitos de la cadena en sus 32 años de historia. También nos gustaría, para demostrarle a la dirección que podemos hacerlo como siempre lo hemos hecho y para mostrar nuestro rechazo absoluto a la externalización de una parte de los servicios informativos, emitir una “Mesa de Análisis” nuestra. Cien por cien producción propia. Una Mesa donde se debatiera con expertos la importancia de las televisiones autonómicas en la vertebración de los territorios, así como la necesidad de generar herramientas parlamentarias y legales que limiten las injerencias políticas en ellas. Esta es nuestra propuesta. El próximo día 17 de Diciembre volvemos a tener una asamblea/concentración en los centros de trabajo. Será un buen momento para decidir entre todos lo más conveniente.
